Redacción/La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 30 de mayo de 2025. — Lo que debía ser un proceso jurídico transparente se ha convertido en un escándalo político que sacude al Congreso local. La filtración de una lista anticipada con los supuestos nombres de nuevos jueces y magistrados ha encendido las alarmas: ciudadanos denuncian que la elección en Tlaxcala ya está “planchada” y orquestada desde las oficinas del poder legislativo.
En redes sociales y foros públicos, la indignación crece bajo un clamor común: “¡Fuera las manos del Congreso!”. Y es que, según versiones extraoficiales, varios diputados locales, en particular ligados a Morena, estarían operando políticamente para colocar a perfiles afines sin que concluya el procedimiento legal ni se respeten criterios de mérito o imparcialidad.
Los nombres que figuran en la filtración han encendido aún más la controversia: Vicente Morales Pérez, Éder Campech Avelar, David del Razo y Miguel Ángel Caballero Yonca, legisladores en funciones, han sido señalados como operadores directos de estas imposiciones judiciales.
La posible manipulación del proceso ha sido calificada como una burla a los principios de autonomía e independencia judicial. “Si los jueces responden a cuotas de poder, ¿qué justicia puede esperar la ciudadanía?”, cuestionó una abogada en redes sociales.
Organizaciones civiles y colectivos ciudadanos exigen un alto a la simulación, la publicación de los criterios reales de selección y que se garantice un proceso público, transparente y con mecanismos de evaluación profesional, no político.
Por su parte, el Congreso del Estado guarda silencio, mientras crece el malestar social. La ausencia de una postura oficial solo alimenta las sospechas de que el proceso está siendo manipulado tras bambalinas.
En un estado donde la justicia sigue siendo lenta, lejana y politizada, la ciudadanía ya no está dispuesta a aceptar más cuotas disfrazadas de nombramientos legales. Hoy, la exigencia es clara:
“No más jueces a modo, no más justicia al servicio de los partidos”.
Porque si la justicia se pacta entre curules, la democracia deja de existir para la gente.