Redacción/La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 10 de julio de 2025.– La línea está trazada desde la cúpula tricolor: el PRI Tlaxcala competirá solo por la gubernatura en 2027, dejando atrás la estrategia de alianzas electorales que impulsó el dirigente estatal Enrique Padilla Sánchez, a quien —de facto— le han amarrado las manos en su intento por mantener un enfoque pragmático y negociador con otras fuerzas.
El anuncio fue hecho esta mañana en rueda de prensa por Jorge Meade Ocaranza, secretario de Organización del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, acompañado del propio Padilla y de la senadora Anabell Ávalos Zempoalteca. De manera clara, Meade adelantó que el tricolor competirá sin coaliciones en las próximas elecciones a la gubernatura, con candidatos surgidos exclusivamente de la militancia local.
“El estado fue entregado a Morena por exlíderes priístas en 2021. No volveremos a cometer ese error”, advirtió Meade, al justificar el viraje hacia una ruta de “identidad pura” y control centralizado, que deja poco margen para maniobras locales.
Este mensaje, aunque envuelto en discurso de unidad, deja entrever un jalón de orejas para Enrique Padilla, quien en meses recientes ha explorado acercamientos con liderazgos panistas y perredistas en busca de una eventual alianza opositora para 2027.
Analistas locales interpretan el anuncio como un revés al pragmatismo político que venía impulsando la dirigencia estatal, y un regreso a una línea más ortodoxa dictada por el CEN, en medio de tensiones internas y la urgencia por levantar al PRI en las encuestas.
Sin alianzas y con una militancia fracturada, el PRI enfrenta un enorme reto para reconstruirse sin muletas ni pactos coyunturales, apostando todo a la “pureza ideológica” en un contexto donde el pragmatismo parecía ser su único camino competitivo.