Intentan linchar a presunto asaltante de transporte público en Cuaxomulco; vecinos furiosos exigen justicia ante ola de robos

Redacción/La Noticia de Tlaxcala

Cuaxomulco, Tlax., 13 de julio de 2025.— La rabia ciudadana estalló este domingo 13 de julio, luego de un violento intento de asalto contra una unidad del transporte público de la ruta Apizaco–Cuaxomulco. Tres sujetos armados interceptaron el vehículo y golpearon brutalmente al conductor en la cabeza con un tubo de fierro, desatando la indignación de vecinos que, cansados de la inseguridad, decidieron actuar por su cuenta.

Los hechos ocurrieron por la tarde, cuando tras una rápida movilización, los habitantes lograron capturar a uno de los presuntos agresores. Los otros dos huyeron hacia barrancas cercanas. Dentro de la unidad se encontraron casquillos percutidos, confirmando que los delincuentes portaban armas de fuego.

 

El sospechoso fue retenido por la comunidad y severamente golpeado. Le exigían información sobre los constantes robos que han sufrido transportistas en la región. Posteriormente, fue trasladado a la comandancia local por la Policía Municipal, pero eso no detuvo el enojo colectivo: una multitud se congregó en el lugar exigiendo justicia inmediata y amagando con linchar al detenido.

La tensión creció al punto de requerir la intervención del Gabinete de Seguridad estatal, que activó el protocolo antilinchamiento. Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la Secretaría de Marina y policías de municipios vecinos acudieron al lugar para evitar un desenlace fatal, enfrentándose incluso a un conato de disturbio durante el operativo de rescate y traslado del presunto asaltante a un hospital.

Horas después se confirmó la detención de otro implicado en los hechos, quien también fue puesto a disposición de la autoridad competente.

Ambos sujetos están señalados por su presunta participación en otros delitos cometidos en la región; sin embargo, podrían quedar en libertad si el conductor agredido no formaliza una denuncia en las próximas 48 horas.

Mientras tanto, la comunidad exige respuestas claras y acciones contundentes, no protocolos tardíos ni promesas vacías.

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