- La gobernadora Lorena Cuéllar anuncia la demolición del Mercado Municipal Emilio Sánchez Piedras, con una inversión de 150 millones de pesos para una nueva construcción. Locatarios no se han pronunciado por su reubicación y el futuro del comercio local.
Guillermo Veloz//La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 24 de marzo de 2025.- El Mercado Municipal Emilio Sánchez Piedras, ícono del comercio en Tlaxcala, enfrenta un futuro incierto tras el anuncio de su demolición por parte de la gobernadora Lorena Cuéllar. Con una inversión proyectada de 150 millones de pesos, se pretende erigir un nuevo edificio que, según las autoridades, modernizará el espacio y mejorará las condiciones para comerciantes y consumidores.
Sin embargo, esta decisión en antaño ha generado inquietud entre los locatarios, quienes han manifestado su desacuerdo y preocupación por la falta de claridad en lo que será el proceso de reubicación temporal durante la construcción. Esta situación recuerda episodios anteriores de resistencia, como las manifestaciones ocurridas en 2021 durante la administración de Anabell Ávalos Zempoalteca, donde los comerciantes se opusieron a proyectos similares que implicaban la demolición del mercado.
El mercado, que cumplió 44 años en septiembre de 2024, presenta deficiencias estructurales evidentes, como goteras, problemas en la red eléctrica y sanitarios en mal estado. Estos problemas han sido señalados por los locatarios, quienes han solicitado mejoras urgentes en el pasado.
A pesar de las condiciones críticas del inmueble, la falta de comunicación efectiva y la incertidumbre sobre el destino de los comerciantes durante el proceso de reconstrucción han generado descontento. Es esencial que las autoridades establezcan un diálogo abierto y transparente con los afectados, asegurando que las decisiones tomadas consideren tanto la modernización de la infraestructura como el bienestar y sustento de quienes dependen del mercado para su subsistencia.
La transformación del Mercado Emilio Sánchez Piedras podría representar un avance significativo para Tlaxcala, pero es fundamental que este cambio se realice de manera inclusiva, atendiendo las preocupaciones de los locatarios y garantizando que la modernización no se traduzca en la pérdida de tradiciones y modos de vida que han caracterizado a este emblemático espacio.
