Jonathan Olvera | La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, 10 de octubre de 2025.– La senadora Ana Lilia Rivera Rivera, representante de Tlaxcala por Morena y presidenta de la Comisión de Defensa Nacional, se encuentra en el ojo del huracán tras denuncias nacionales sobre actos irregulares y extorsión cometidos por su personal de confianza.
El alcalde de Ahome, Sinaloa, Antonio Menéndez de Llano Bermúdez, denunció públicamente que Anel Bautista Delgado, jefa de oficina de Rivera, habría utilizado indebidamente papelería oficial del Senado y recursos de la comisión para gestionar reuniones y conferencias con alcaldes y funcionarios públicos, presuntamente con fines de extorsión o beneficio personal.
Según reportes de medios nacionales como El Excelsior, Bautista Delgado, en coordinación con Gerardo Horta, un colaborador señalado por presunta corrupción y uso indebido de espacios del Senado, habría organizado eventos, gestiones y reconocimientos usando el nombre de la senadora, bajo el argumento de “fortalecer la estrategia de seguridad municipal”.
El caso ha generado críticas sobre la supervisión y responsabilidad de Ana Lilia Rivera, quien aseguró desconocer estas acciones, aunque el discurso contra la corrupción del partido Morena se ve debilitado ante el escándalo. El incidente ha puesto en evidencia cómo redes internas de colaboradores pueden aprovecharse de la estructura parlamentaria para actos ilícitos, generando alarma entre alcaldes y funcionarios locales.
El senador Enrique Inzunza, a quien se acercó el alcalde de Ahome, confirmó que Rivera desconocía la carta enviada por su jefa de oficina, mientras que algunos integrantes de la red de corrupción detectados en agosto fueron nulificados. Sin embargo, la mancha política y mediática ya afecta la imagen de la legisladora tlaxcalteca, en un contexto donde el liderazgo de Morena se ve cuestionado por la relación entre funcionarios y prácticas irregulares.
