Redacción/La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 15 de julio de 2025.- Después de semanas de retrasos, anuncios reciclados y expectativas postergadas, el tan prometido Distribuidor Vial “Santa Ana” por fin arrancará su construcción este miércoles 16 de julio. Pero el inicio de la obra no llega sin costos inmediatos: un cierre total de la carretera Puebla–Belén, desde el Viaducto San Pablo Apetatitlán hasta el Distribuidor El Alto, generará un severo impacto en la movilidad de miles de personas usuarias.
La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes en Tlaxcala ha confirmado que durante la obra, el tránsito pesado será desviado al Libramiento Tlaxcala, mientras que los vehículos particulares deberán utilizar rutas alternas poco eficientes, ya saturadas en horarios pico.
Los trayectos alternos, definidos en conjunto con autoridades municipales y estatales, implican desvíos largos, rodeos confusos y una afectación directa a los habitantes de Chiautempan, La Magdalena Tlaltelulco y Tlaxcala capital, quienes paradójicamente son los mismos 192 mil ciudadanos a quienes se promete beneficiar con esta infraestructura.
Mientras se prevé un Paso Superior Vehicular de apenas 0.69 kilómetros de longitud, se calcula que generará 5,770 empleos temporales y reducirá en sólo 20 minutos el tiempo de traslado una vez concluido. ¿Suficiente para justificar meses de complicaciones?
El transporte público tampoco se salva: ahora deberá desviarse por calles como Emiliano Zapata, Ignacio Picazo Norte, Centenario, Progreso Norte y Antonio Díaz Varela, lo que anticipa aún más retrasos para los pasajeros que dependen del servicio diario.
La obra incluye 18 apoyos y cuatro carriles, pero no queda claro el cronograma real ni los tiempos estimados de entrega, en un estado donde la infraestructura suele caminar al ritmo de los informes de gobierno, no de las necesidades ciudadanas.
Mientras las autoridades venden la obra como un paso hacia la modernización, para muchos ciudadanos representa otro episodio de desgaste vial, improvisación institucional y promesas que llegan… pero cuando ya no queda más remedio que cumplirlas.
