Jonathan Olvera/La Noticia de Tlaxcala
Tlaxcala, Tlax., 16 de junio de 2025. — En una muestra más del abandono institucional, vecinos de la comunidad de San Esteban Tizatlán han tenido que improvisar con llantas, piedras y una lona para advertir sobre un enorme bache formado en la Avenida Juárez, tras las fuertes lluvias recientes. La afectación se ubica entre el Instituto David Palma y el Hotel Señorial, uno de los tramos con mayor tránsito vehicular en la zona.
Desde la semana pasada, y ante la falta de respuesta de las autoridades municipales, habitantes de la zona colocaron los objetos como medida de emergencia para evitar accidentes, ya que el bache representaba un riesgo inminente para automovilistas, motociclistas y peatones. Sin embargo, hasta este lunes por la mañana, los elementos de advertencia siguen en el lugar, parcialmente desplazados por nuevas lluvias, mientras el bache aparenta haber sido rellenado de forma provisional, aunque sin señalización oficial ni trabajos definitivos.
“La lluvia se lleva las piedras y mueve las llantas, pero nadie viene a ver qué se necesita. Si no lo señalamos nosotros, ya habría pasado una tragedia”, comentó un vecino que participa en la vigilancia del lugar.
Esta situación evidencia la omisión del gobierno municipal en tareas elementales de mantenimiento vial y seguridad urbana. La comunidad demanda una intervención completa, no parches temporales ni simulación de trabajo, pues el riesgo persiste y los vecinos no deberían sustituir las funciones de Protección Civil ni de Obras Públicas.
Mientras tanto, la “señalética ciudadana” sigue siendo la única barrera entre los conductores y un bache que —más allá de su tamaño— simboliza un cráter en la atención gubernamental.
